B.5.4.- ESTAMPAS DE OTOÑO
I
Esta mañana temprano
me fui al monte a buscar setas.
El alba va pincelando
la loma de las mesetas.
La tierra estaba mojada
y a mi pisar respondía
con una alegre alborada
de olores y lozanía,
olores recios a otoños,
a frutas ya maceradas
por las hojas sepultadas:
membrillos, hongos, madroños...
II
El ciervo entre los pinares,
escondido en la maleza,
sigue la naturaleza
entonando sus cantares,
concierto que rivaliza
estas noches otoñales
en conseguir el favor
de la cierva escurridiza
frente a otros sementales.
III
El sol ya abandonaba
el lecho del horizonte;
los cerros iluminaba
con sus cabellos de bronce.
El día abre sus puertas
y el campo entero lucía
la espléndida algarabía
de color, frutos y setas.
Una mañana brillante
(nada de melancolía)
y cada árbol vestía
su traje mas elegante:
la encina majestuosa
que con su manto real
de hojas verdes y espinosas
está mostrando orgullosa
el fruto de sus bellotas
enterrado en su dedal;
los poderosos castaños,
de verde y ocre vestidos,
dejan volar sus castañas
de los erizados nidos
que pueblan todas sus ramas.
La castaña, del otoño
el fruto más popular,
servida en alta cocina
o asada en cualquier esquina,
es exquisito manjar.
IV
La suave brisa platea
las hojas de los olivos.
Rasgando el azul del cielo,
pasan veloces dos mirlos
buscando lugar más fresco.
El sol va ganando altura
e inunda toda la vega
con una temperatura
de mañana veraniega.
V
Yo voy pateando el campo
-aunque he perdido destreza-
y me tomo algún descanso
(la edad así lo aconseja).
Y, gracias a la abundancia
que da la naturaleza,
de rubias y hermosas setas
con su profunda fragancia
yo voy llenando mi cesta.
Como no soy entendido
y hay que andarse con respeto,
de las muchas variedades
que se dan en esta sierra
sólo cuatro recolecto:
la tana o yema de huevo
(la preferida del César),
el boletus o tentullo,
níscalos o pinateles
y la elegante lepiota,
llamada aquí gallipierno
y cucurril en mi tierra.
VI
El calor está apretando
y la cesta ya está llena.
Ya para casa me vuelvo.
La amarilla hoja del chopo
cubre de oro la ribera.
Galaroza, 22 de octubre 2014.
FBARRIO